-Su maternidad divina: Es verdadera madre humana de Jesucristo, el hijo de Dios.
-Su perpetua virginidad: María concibió por obra del Espíritu Santo, por lo que siempre permaneció virgen.
-Su asunción a los cielos: Al final de su vida, fue subida en cuerpo y alma al Cielo.
¡Gracias por la entrada, y por el blog!
ReplyDelete¡Magnifico!
Dios le bendiga!!!
Una entrada muy bonita,gracias por compartirla.
ReplyDeleteUn saludo.
Me alegro mucho de tu visita.¡Gracias!
ReplyDeleteMuy unidas en Nuestra madre del Cielo.
Un abrazo.
Dios y la Virgen te bendigan.
Hola, paso para desearle un feliz ADVIENTO.
ReplyDeleteUn abrazo.